Jim
Rohn, hablaba sabiamente cuando comparaba las estaciones del año con las
estaciones de la vida, cada ser humano atraviesa
etapas que fácilmente pueden ser comparadas con la llegada de la primavera, el
verano, el otoño o el invierno.
Este cuento nos ilustra esta analogía...
Había un
hombre que tenia cuatro hijos. El buscaba que ellos aprendieran a no juzgar las
cosas tan rápidamente sin valorarlas en su conjunto y entonces decidió enviar a
cada uno por turnos a ver un árbol de peras que estaba a una gran distancia.
Todos sabían que visitarían el mismo árbol pero desconocían que lo harían en
diferentes fechas del año.
El primer
hijo fue en el invierno, el segundo en primavera, el tercero en verano y el
hijo más joven en el otoño.
Cuando
todos ellos habían ido y regresado, el los llamó y estando juntos les pidió que
describieran lo que habían visto para que todos escucharan.
El primer
hijo mencionó que el árbol era horrible, doblado y retorcido.
El segundo
dijo que no, que estaba cubierto con brotes verdes y lleno de promesas.
El tercer
hijo no estuvo de acuerdo, el dijo que estaba cargado de flores, que tenia
aroma muy dulce y se veía muy hermoso, era la cosa mas llena de gracia que
jamás había visto.
El ultimo
de los hijos no estuvo de acuerdo con ninguno de ellos, el dijo que estaba
maduro y marchitándose de tanto fruto, lleno de vida y satisfacción.
Entonces el
hombre les explico a sus hijos que todos tenían razón, por que ellos solo
habían visto una de las estaciones de la vida del árbol.
Con frecuencia nos sucede, juzgamos las situaciones que estamos atravesando, buenas o malas, sólo por la estación en la cual nos encontramos en ese momento, cuando en realidad la vida es como las estaciones del año.
No hay que darnos por vencidos en invierno, la promesa y la belleza de la primavera está por llegar, luego seguirá un maravilloso verano, la satisfacción del otoño, y así sucesivamente.
Perseveremos a través de las dificultades y los malos momentos... pues sin duda vienen por delante mejores tiempos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario