Me siguen

martes

Si hay que cerrar un ciclo... es necesario tomar todas las precauciones.

Para cerrar un ciclo, y abrir otro completamente nuevo y diferente, ya sea terminar con una situación, irnos de una relación o movernos a otro lugar, no podemos dejar ningún hilo suelto: tenemos que salvar nuestra responsabilidad, cumpliendo con todos y cada uno de los compromisos que tengamos pendientes. Inclusive estar dispuestos a perdonar, si fuese necesario, a cambiar algunos de los hábitos y de las actitudes negativas que nos acompañaron durante esta etapa de la vida, por otros, positivos, que renueven y suavicen nuestra forma de vivir y que realmente nos impulsen a abrir un nuevo ciclo.

No podemos abandonarlo todo y pretender que las cosas se mantendrán o se arreglarán por sí solas, o que no tendremos que volver a enfrentarlas en algún momento porque ya nos fuimos o, simplemente, así lo decidimos… Los ciclos hay que cerrarlos con conciencia, voluntad y madurez para que podamos dejarlos en el pasado y los efectos que otros produzcan no nos alcancen y sigan afectándonos.

Para cerrar un ciclo tenemos que estar dispuestos a soltar, a renunciar y a cambiar para comenzar de nuevo, porque si no lo estamos, la relación, el apego y el amarre pendiente que mantenemos con ese pasado nos alcanzará en algún momento para que tengamos que afrontarlo, resolverlo y darlo por terminado.

De todas las situaciones que vivimos siempre tenemos algo que aprender, especialmente si fueron difíciles o repetitivas en nuestra vida; lo más importante es que tengamos la claridad que nos permita reconocer y asumir el precio que tendremos que pagar para cerrarlas definitivamente, pensando en la liberación y la que experimentaremos después de hacerlo.

Recuerda que no importa que tan difíciles o inesperadas sean las situaciones que se te presenten, siempre contarás con la ayuda y la guía divina para afrontarlas y manejarlas; pero serás tú quien tenga que asumir el control y la responsabilidad de la situación, pues sólo a través de la voluntad, el valor, la determinación y la perseverancia, podrás resolverlas y superarlas para experimentar la plenitud que da poner nuestros asuntos en orden y en paz.

CLAVES PARA CERRAR UN CICLO

1 ACEPTA LO QUE NO PUEDES CAMBIAR
El pasado ya no importa, pues ya ocurrió. Suelta los recuerdos negativos, vive tu duelo, perdona y libérate del peso emocional que sientes. Aprende a ver los inconvenientes como oportunidades y procura darle una respuesta creativa y oportuna a cada situación.

2 AFRONTA LA SITUACION CON VALOR
No metas tu cabeza dentro de la arena como el avestruz. Si dejaste un asunto pendiente, enfréntalo y resuélvelo lo más pronto que puedas, busca el momento y la manera apropiada de hacerlo. Los temas pendientes son como los intereses de un préstamo, suben y se acumulan mientras no se paguen, el hecho de ignorarlos sólo agrava las cosas.

3 NO PIENSES TANTO
Vamos, no pienses tanto las cosas... planifícalo bien, revísalo una vez más y actúa. Recuerda que mientras más vueltas le das en la cabeza a una idea o a una situación, más difícil se hace de resolver. Además, en algún momento el temor te hará sentir paralizado y te será difícil tomar la decisión correcta.

4 SÉ HONESTO Y FIRME
No participes en chismes o acciones dirigidas a enredar o a evadir la solución de una situación. Hazlo con decisión, franqueza y fuerza para resolver el asunto pendiente.

5 CONSERVA LA CALMA
Aprende a canalizar el estrés, la tensión o la preocupación, no permitas que se conviertan en malhumor, porque muy fácilmente te volverás irritable o violento. Tampoco te dejes llevar por la reacción o las emociones, mantén una actitud serena y con voz suave y argumentos firmes afronta la situación."Ponte en el lugar de la contraparte y procura mantener en todo momento una actitud pacífica y tolerante"

6 SÉ CONSIDERADO
Aprende a canalizar el estrés, la tensión o la preocupación, no permitas que se conviertan en malhumor, porque muy fácilmente te volverás irritable o violento. Tampoco te dejes llevar por la reacción o las emociones, mantén una actitud serena y con voz suave y argumentos firmes afronta la situación.

7 VUÉLVETE UN ELEMENTO CONCILIADOR
Procura facilitar con tus comentarios y actitud la buena comunicación, el entendimiento y el acuerdo entre las partes en conflictos. Mantente siempre atento a encontrar las semejanzas y los puntos en común para trabajar en todo momento por los acuerdos.

8 PERDONA A LOS SUPUESTOS CULPABLES
Mientras guardes el recuerdo de lo que te hicieron te mantienes preso del pasado y afectado por ese suceso. Cierra los ojos, recuerda la imagen de la persona, háblale mentalmente sobre tu malestar… Al final dile que le perdonas e imagina que sonríe.

9 NO TE DEJES AFECTAR POR LOS DEMÁS
Muchas veces la actitud y el comportamiento de los otros nos afecta, hasta el punto en que trastornan nuestra manera de actuar, confunden nuestros objetivos y perturban la claridad que necesitamos conservar para resolver la situación de la mejor manera. Evita reaccionar y tómate unos segundos para pensar antes de actuar.

10 BAJA EL NIVEL DE EXPECTATIVA
Deja de pensar en la dificultad que enfrentarás, en lo que dirán o en lo que harán los demás... suponer lo que va a suceder hará que te llenes de ansiedad y que lo veas más difícil.



Escrito por Maytte Sepulveda
mindstarmx.blogspot.com

¿Sabes cómo reconocer a un Manipulador?

Primero que todo debemos volvernos  alérgicos al drama...

No te dejes pero tampoco hagas que te provoquen a reaccionar mal o irracionalmente. Los manipuladores saben usar el drama  para aparentar que ellos están bien.
Es importante conocer que existen personas que manipulan de una manera irresponsable su entorno para obtener beneficios e indudablemente éstos afectan a terceros, de ahí la importancia de conocer bien el perfil de estas personas para no caer en sus juegos.

Podríamos decir que, en cierta manera todos estamos sujetos a "manipular" nuestra realidad cuando no tenemos otra opción, sin embargo, existen códigos en los cuáles, cuando se modifica o manipula eso que queremos cambiar para nuestro beneficio, no se afecta a otros intencional y conscientemente, muy al contrario, deseamos que tanto unos como otros estemos bien y cumpliendo todas nuestras metas y objetivos de vida. 

Por mucho que anhelemos ser felices y queramos que las cosas resulten según nuestros planes y propósitos, la vida tiene giros inesperados y podemos cruzarnos en nuestro camino con personas inescrupulosas que ven a los demás  como una cosa, un objeto... un  recurso o una mercancía de la cual pueden impunemente aprovecharse.

A este tipo de personas (hombre o mujer),  los conocemos como "manipuladores", y se caracterizan por su tendencia a obtener de los demás un provecho egoísta, sirviéndose de diversos métodos entre los que se cuentan como más frecuentes: la ilusión... o bien la presión ... hay varios etc más... y casi siempre comienzan con un engaño.

Las razones.

Los que manipulan constantemente lo hacen por varias razones... 

Las más destacadas son: por comodidad y porque siempre buscan un camino corto para todo,  porque se niegan a pagar el precio del éxito que supone obtenerlo, el cual es trabajar para obtenerlo, sea en cualquier campo en el que se desarrolle, los que no son constantes ni en sus estudios ni trabajos, todo lo quieren empezar y luego lo dejan a mitad de camino, casi siempre echándole la culpa de sus fracasos a los demás... porque no me ayudaron... porque no me quieren... porque no me dieron...¡ son sus excusas preferidas ! y entonces optan por mentir, prometer, sobornar, chantajear o hacer todo tipo de triquiñuelas con tal de obtener rápidamente aquello que desean.

Violan las reglas y se saltan los procedimientos con asombrosa facilidad. Usted sabrá que esto es así para ellos cuando les escuche decir: "no te enrolles", "nadie lo sabrá", "así es más rápido", "no te des mala vida por eso", "otros también lo han hecho" o "no seas tan correcto". En su lenguaje se revela el pragmatismo que deja afuera como algo insignificante a los principios o valores que deben acompañarnos en nuestra vida.

1. Miente.

El manipulador miente con asombrosa facilidad. Si es experto, verá usted en sus hábitos de comunicación que tuerce la realidad incluso en circunstancia aparentemente insignificantes. 
Habla mal de su familia, no es una persona agradecida, al contrario, a los que lo han ayudado los desprecia y se expresa en forma incorrecta de ellos, les echa la culpa de todo lo malo que le ha sucedido.
Si está usted junto a alguien que recibe una llamada y en su presencia dice que está con otra persona o en otro lugar, tiene cerca un potencial manipulador.

Escúchelo y verá que le miente a la gran mayoría de las personas, es decir  a cualquiera para lograr sus fines. Si usted le dice algo al respecto, puede que él le sonría, le palmee la espalda compasivamente y le de una excusa o le hablará mal de la persona a la que acaba de engañar.

2. Oculta.

Los más diestros manipuladores ocultarán información personal. En el caso de los estafadores, usted no sabrá cómo ubicarlos o localizarlos pues operan como fantasmas que confunden y posponen todo... porque eso los delataría. Si usted busca que precisen información, escuchará evasivas y cuentos en los que está en cambio, de paso, en revisión, o cosas de ese tipo nada claras o concretas.

Paradójicamente, se empeñarán en saberlo todo sobre usted. Escudriñan en su vida para saber donde vive, a qué se dedica, con quién vive y un sin fin de detalles. Los mejores, averiguan indirectamente o colocan el tema para que usted se confiese sin darse cuenta.

3. Halaga.

Halagar es algo que un manipulador verdadero sabe hacer muy bien. Por experiencia y estudio, sabe encontrar el punto de orgullo que le hace a usted sentirse especial y se detiene a sembrar allí hasta ganar su confianza absoluta. No se deje llevar fácilmente por los halagadores, pues pocas personas dan un reconocimiento sincero y desinteresado. Manténgase en guardia contra este derrame súbito de miel, pues lo que busca es endulzarle el oído. 

4. Promete.

La promesa es una de las armas favoritas de los manipuladores. Después de conocerle y saber lo que usted busca, el encantador le prometerá las mil y una noches de maravillas... . Es así como muchas mujeres han sido llenadas de fantasía que creyeron reales, para verse luego desechas emocionalmente al verificar que no había nada más que palabras en su desteñido príncipe azul.

5. Ayuda.

La propiciación, el empeño compulsivo en hacer favores, es una corona de espinas que los farsantes entrenados colocan sobre la cabeza de sus desplumadas víctimas. El manipulador sabe que todos deseamos tener esto o aquello...  que nos gusta ser atendidos y que eso nos llena...  por eso usa como su arma secreta el complacernos.

Yo te ayudo...  yo te llevo...  dan y dan gota a gota y luego,  llegan a cobrar en el momento justo. Todo, parte de una estrategia en la que se nos hipoteca la vida debiendo favores y regalos que nunca fueron gratis y pocas veces solicitados.

6. Emociona.

A veces el recurso de manipulación es netamente emocional. Un manejador de gente no ignora que las emociones intensas nos impulsan a actuar muchas veces sin el amparo de la razón. Por eso se sirve de sus palabras para presionar ciertos actos que le resulten convenientes. Culpar a alguien es una estrategia común de quien no asume sus responsabilidades.

Expresiones como "mira lo que hiciste", "por qué no me has llamado", "yo no te hubiese tratado así", revelan un chantaje emocional cuya letra de fondo es "debiste hacer lo que yo quería". Saben atemorizar... porque buscan un efecto similar al miedo para controlar la conducta futura. "No hagas eso, mejor yo te ayudo",o lo que te están ofreciendo no vale la pena... o eso no es importante...  es una forma de decir que lo bueno es lo que el manipulador diga.

7. Se esconde.

Trabajar en la sombra y usar a otros para sus fines puede ser parte del estilo de algunos manipuladores, pues el manipulador no es adulto y por tanto no es ni transparente ni honesto ni responsable. Poco le cuesta regar chismes, calumniar, exagerar y enredar a la gente en verdaderas ficciones totalmente inexistentes. Son pescadores que saben sacar ganancia de los "ríos revueltos".

Manténgase alerta ante esas señales

No quiero decir aquí que todo el que halague, pregunte o sea amable es un manipulador, sino que muchos usan esas formas para ocultarse.

Si desea usted salir de la órbita de un manipulador: 
- Manténgase alerta, no crea en ofertas o promesas no verificadas, no se haga eco de rumores no confirmados, sea ecuánime ante halagos y regalos y no deje llegar muy cerca a desconocidos que sean demasiado amables sin razones aparentes.

Si quiere reducir sus posibilidades de convertirse en un manipulado, recuerde que "no todo lo que brilla es oro", y que "el mapa no es el territorio". Una vez una estafadora, luego de ser confrontada duramente por mí, me dijo con pasmosa serenidad: "se puede estafar a las personas porque quieren lo mejor, pero lo quieren muy fácilmente".

OJO... Una persona manipuladora conseguirá que hagas casi todo lo que quiere, incluyendo el darle dinero, robar... lastimar a otros, etc., sólo será cuestión de tiempo...  Una persona manipuladora puede causarte un daño real en tu vida.

Para aprender cómo lidiar con este tipo de personas, sigue leyendo.

Cómo actuar ante un manipulador.

Protege tanto como puedas a ti y a los demás que estén involucrados de la influencia del manipulador... No puedes hacer nada por la persona o las personas que caen en su juego, pero puedes protegerte a ti mismo y a los demás, sobre todo a los más cercanos, pues más temprano que tarde verás el infierno que pretende el manipulador poner a tus pies. 

Guarda distancia de esa persona... y trata de hacerlo con  relativa amabilidad, es la forma para salirte de un manipulador. 

Procura mantener la paz. Si el manipulador nota el incremento de distancia, trata de hablarle sobre sus cualidades manipuladoras. Mantén la calma, relájate y contrólate al platicar sobre esto, aún cuando esta persona no lo haga. El drama sólo hará que las cosas sean más difíciles para ti. Si a ellos les gusta el drama, deja que se complazcan por ellos mismos.

Ten consciencia de que puedes necesitar desconectarte activamente de esa persona. Esto no significa simplemente poner distancia entre los dos, sino dejar de tener contacto completamente. Aunque sea difícil, al final será lo más sano tanto para ti como para el manipulador.

Sé igualmente consciente de que todo estará bien eventualmente. Las personas pueden y maduran con el tiempo. 

Nota:
Todo el contenido publicado en este artículo es tomado de diversas fuentes, además de comentarios, opiniones, investigaciones y testimonios personales. 


Fuentes: www.laexcelencia.com, www.es.wikihow.com

¡Atrévete... vuelve a empezar!




Cuando la vida se derrumba, cuando nuestros proyectos caen hechos añicos, cuando quien amamos nos traiciona, cuando ese trabajo en que habíamos puesto tanta energía nos abandona es cuando la vida te está pidiendo volver a empezar…

No se porque cuesta tanto empezar de cero cuando en realidad es la oportunidad de iniciar una nueva aventura por esta vida… pero claro, nos han enseñado a planificar cada suceso de nuestra vida, sin dar cabida a las sorpresas y sufrimos al no poder cumplir esos planes, cuando debería entusiasmarnos hacer otros…
La vida no es un viaje por un camino recto... al contrario esta  lleno de curvas, encrucijadas, puentes, túneles, montañas, valles, mares y ríos… es un viaje que puede ser muy entretenido solo si cambias tu percepción de ello…
Y estamos todos los días volviendo a empezar, cada mañana al despertar renacemos, cada vez que entramos a la oficina en el trabajo volvemos a empezar… cada semana estamos reiniciando la tarea, cada mes, cada año, cada cumpleaños, cada sonrisa, cada palabra es un renacer… entonces ¿Por qué nos cuesta tanto empezar de nuevo?

Si no ofreciéramos tanta resistencia al cambio no habría necesidad de que todo se desmoronara para volver a empezar. Bastaría con darnos cuenta de que ya no somos felices en donde estamos, que nuestros ideales han cambiado, que ese trabajo ya no nos realiza o que esos círculos que frecuentamos ya no satisfacen nuestros ideales… Sería fácil si no nos hubiesen programados para retener y conservar todo. La sociedad juzga a quienes van cambiando de trabajo, de pareja, de lugares… cuando lo único que debiéramos hacer es escuchar al corazón para estar en cualquier lugar, situación o relación… es simple, pero lo hacemos tan complicado…

Las energías de este tiempo nos llevan a fluir y eso es darle paso al alma para que se manifieste y escuchar al corazón. Si estás en un trabajo que te fastidia y debes soportar la presión que te causa, tal vez deberías buscar otro que te haga más feliz, aunque la remuneración sea menor… o quizás debas dejar de estar colaborando en el cumplimiento de los sueños de tu jefe y la vida te esté invitando a ir a concretar tus propios sueños.
Si estás en una relación por costumbre, por temor a la soledad o porque económicamente te resulta más conveniente, tal vez sea hora de que pongas oído a tu corazón para ver que te aconseja al respecto… 
Y si creciste, pero tu grupo de amigos se mantiene intacto, sin dar cabida a lo nuevo –o al revés– será que el Universo te está gritando que cambies…

Siempre parece difícil volver a empezar porque nos saca de la zona de confort y debemos caminar hacia lo nuevo. Pero lo nuevo siempre resulta atractivo, cuando no interviene el ego… porque es ese tirano quien no quiere que cambies porque está muy cómodo donde te tiene y te recuerda constantemente ¿Qué van a decir los demás si… ? Es eso lo que te mantiene anclado en la infelicidad. Tu Ego.

Te recuerdo que cuando debas partir de este planeta, tu ego permanecerá acá, esperando poder tiranizar a otro ser y serás tú, el verdadero Ser que te habita, quien se encontrará con la terrible verdad de que por miedo, cobardía o vanidad no se permitió vivir la vida como una gran aventura llena de experiencia nuevas que integrar… y tendrás que volver a repetir de grado (vida) para poder volver más crecido y seguir avanzando en la espiral evolutiva…

No importa si tienes 25, 30, 40, 70 u 80 años… siempre podrás volver a empezar, aunque sea en el mismo lugar, pero con otra visión, con una nueva conciencia y sobre todo con una vibración más elevada… porque volver a empezar siempre es ascender…

A todos mis queridos lectores les estoy dando un empujoncito para que se animen a volver a empezar… justo hoy... Si es lo que quieres, si sientes que en tu interior hay un nuevo anhelo, una ilusión por estar o ser diferente... piénsalo  y  ¡ATRÉVETE, VUELVE A EMPEZAR!

Feliz recomenzar… en Amor y Conciencia.

 Tomado de: sanandoelalma.blogspot.com

Crecer...


Cuanta verdad se encierra en estas palabras...

Es imposible atravesar la vida... sin que un trabajo te salga mal hecho, sin que algunas amistades causen decepción, sin padecer alguna vez de salud, sin que nadie de la familia fallezca, sin que un amor te abandone... sin equivocarse en un negocio. Ese es el costo de vivir.

Sin embargo, lo importante no es lo que suceda, sino como reaccionamos nosotros...

Si te pones a coleccionar heridas eternamente sangrantes, vivirás como un pájaro herido incapaz de volver a volar. Uno crece cuando no hay vacío de esperanza, ni debilitamiento de voluntad, ni pérdida de fe.
Uno crece al aceptar la realidad y al tener el aplomo de vivirla.
Crece cuando acepta su destino, y tiene voluntad de trabajar para cambiarlo.
Uno crece asimilando y aprendiendo de lo que deja detrás... construyendo y proyectando lo que tiene por delante.
Crece cuando se supera, se valora, y da frutos. Cuando abre camino dejando huellas, asimilando experiencias... ¡Y siembra raíces!

Uno crece cuando se impone metas, sin importarle comentarios negativos, ni prejuicios, cuando da ejemplos sin importarle burlas, ni desdenes... cuando se es fuerte por carácter, sostenido por formación, sensible por temperamento... Y humano por nacimiento!...

Cuándo eres tú mismo. Cuando enfrentas el invierno aunque pierda las hojas, recoges flores aunque tengan espinas y marcas camino aunque se levante el polvo.
Uno crece ayudando a sus semejantes, conociéndose a sí mismo y dándole a la vida más de lo que recibe... Uno crece cuando se planta para no retroceder... Cuando se defiende como águila para no dejar de volar... Cuando se clava como ancla en el mar y se ilumina como estrella. Entonces... Uno Crece.

 DESCONOZCO EL AUTOR



miércoles

Experiencias amargas...

Alguna vez has sentido la desilusión de descubrir la verdad? 
¿Esa verdad que descubre un engaño o una mentira?

 Seguramente Si!!     ¿Y cómo te has sentido?                                                          

La incomodidad que provoca el sentirnos defraudados, es una experiencia que nunca deseamos volver a vivir, y a veces, nos impide volver a confiar en las personas, aún sin ser las causantes de nuestra desilusión.

Pero la Sinceridad, como los demás valores, no es algo que debemos esperar de los demás, es un valor que debemos vivir para tener amigos, para ser dignos de confianza....

La Sinceridad es un valor que caracteriza a las personas por la actitud congruente que mantienen en todo momento, basada en la veracidad de sus palabras y acciones.

Para ser sinceros debemos procurar decir siempre la verdad, esto que parece tan sencillo, a veces es lo que más cuesta trabajo. Utilizamos las "mentiras piadosas" en circunstancias que calificamos como de baja importancia, donde no pasa nada: como el decir que estamos avanzados en el trabajo, cuando aún no hemos comenzado, por la suposición de que es fácil y en cualquier momento podemos estar al corriente. Obviamente, una pequeña mentira, llevará a otra más grande y así sucesivamente... hasta que nos sorprenden.

Al inventar defectos o hacerlos más grandes en una persona, ocultamos el enojo o la envidia que tenemos. Con aires de ser "franco" o "sincero", decimos con facilidad los errores que comenten los demás, mostrando lo ineptos o limitados que son.

No todo esta en la palabra, también se puede ver la Sinceridad en nuestras actitudes. Cuando aparentamos lo que no somos, (normalmente es según el propósito que se persiga: trabajo, amistad, negocios, círculo social...), se tiene la tendencia a mostrar una personalidad ficticia: inteligentes, simpáticos, educados, de buenas costumbres... En este momento viene a nuestra mente el viejo refrán que dice: "dime de que presumes... y te diré de que careces"; gran desilusión causa el descubrir a la persona como era en la realidad, alguna vez hemos dicho o escuchado: "no era como yo pensaba", "creí que era diferente", "si fuese sincero, otra cosa sería"...

Cabe enfatizar que "decir" la verdad es una parte de la Sinceridad, pero también "actuar" conforme a la verdad, es requisito indispensable.

EL MOSTRARNOS "COMO SOMOS EN LA REALIDAD", NOS HACE CONGRUENTES ENTRE LO QUE DECIMOS, HACEMOS Y PENSAMOS, ESTO SE LOGRA CON EL CONOCIMIENTO Y LA ACEPTACIÓN DE NUESTRAS CUALIDADES Y LIMITACIONES.


En ocasiones faltamos a la Sinceridad por descuido, utilizando las típicas frases "creo que quiso decir esto...", "me pareció que con su actitud lo que realmente pensaba era que ..." ; tal vez y con buena intención, opinamos sobre una persona o un acontecimiento sin conocer los hechos. Ser sincero, exige responsabilidad en lo que decimos, evitando dar rienda suelta a la imaginación o haciendo suposiciones.

Para ser sincero también se requiere "tacto", esto no significa encubrir la verdad o ser vagos al decir las cosas. Cuando debemos decirle a una persona algo que particularmente puede incomodarla (pensemos en cosas como: su modo de vestir, mejorar su lenguaje, el trato con los demás o la manera de hacer y terminar mejor su trabajo), primeramente debemos ser conscientes que el propósito es "ayudar" o lo que es lo mismo, no hacerlo por disgusto, enojo o porque "nos cae mal"; enseguida encontrar el momento y lugar oportunos, esto último garantiza que la persona nos escuchará y descubrirá nuestra buena intención de ayudarle a mejorar.

En algún momento la Sinceridad requiere valor, nunca se justificará el dejar de decir las cosas para no perder una amistad o el buen concepto que se tiene de nuestra persona. Si por ejemplo, es evidente que un amigo trata mal a su esposa o a sus empleados, tenemos la obligación de decírselo, señalando las faltas en las que incurre y el daño que provoca, no solamente a las personas, sino a la buena convivencia que debe haber.

La persona sincera dice la verdad siempre, en todo momento, aunque le cueste, sin temor al qué dirán. Vernos sorprendidos en la mentira es más vergonzoso.

Al ser sinceros aseguramos la amistad, somos honestos con los demás y con nosotros mismos, convirtiéndonos en personas dignas de confianza por la veracidad que hay en nuestra conducta y nuestras palabras. A medida que pasa el tiempo, esta norma se debe convertir en una forma de vida, una manera de ser confiables en todo lugar y circunstancia.

LA SINCERIDAD ES UN VALOR QUE DEBEMOS VIVIR PARA TENER AMIGOS, PARA SER DIGNOS DE CONFIANZA


Fuente:

Publicado por ESTEBAN PÉREZ